Tras el terremoto de magnitud 8.8 en Kamchatka, en Rusia, se alertó a la población por un posible tsunami en las costas del Pacífico.
El sismo ocasionó olas de 1.9 metros en California y olas de 40 centímetros en la costa sur de Hokkaido, en Japón, mientras que en Chile, El Salvador, Costa Rica, Nicaragua y México, se activaron alertas por un posible tsunami.